Síntomas de la otodectosis
La otodectosis, o ácaros del oído, es una enfermedad frecuente en los gatos, causada por unos pequeños parásitos llamados Otodectes cynotis. Viven en los conductos auditivos, se alimentan de las células epiteliales y provocan irritaciones graves. Los primeros signos son un picor constante: el gato se rasca activamente, sacude la cabeza y puede rascarse las orejas hasta hacerlas sangrar. En el interior del conducto auditivo se acumula una placa oscura, casi negra, similar a los posos del café. Las orejas suelen desprender un olor desagradable. En una fase más avanzada, el animal se vuelve irritable y letárgico, y puede negarse a comer a causa del dolor. Si no se trata, la enfermedad puede provocar complicaciones como otitis media, inflamación del oído medio e incluso pérdida de audición.

Tratamiento y prevención de la otodectosis
El tratamiento de la otodectosis siempre empieza con una limpieza a fondo del conducto auditivo. Para ello se utilizan lociones o soluciones especiales para gatos, que ablandan las costras y eliminan las secreciones. Tras la limpieza, se utilizan antiparasitarios para destruir el ácaro. Es importante tratar no sólo una oreja, sino las dos: aunque sólo una parezca afectada, los parásitos pasan rápidamente.
La prevención implica la inspección periódica de las orejas, sobre todo tras el contacto con el patio o con gatos callejeros. Es importante mantener la inmunidad del animal, desparasitándolo a tiempo y utilizando gotas o preparados para prevenir los ácaros. La limpieza y el cuidado por parte del propietario reducen considerablemente el riesgo de infección.
Preparados para el tratamiento y la prevención de los ácaros del oído en los gatos.
En la práctica veterinaria se utilizan varios grupos de remedios:
Gotas óticas: «Otynum», «Otibevin», «Surolan», «Aurican» – combinan la acción antiparasitaria, antiinflamatoria y antifúngica.
Gotas sistémicas en el torniquete: «Stronghold», «Advocate», «Revolution» – actúan no sólo contra los ácaros del oído, sino también contra las pulgas y ciertos gusanos.
Lociones limpiadoras: «Otovin», «Bars-lotion», líquidos auriculares especiales para gatos.
Medios adicionales: en caso de inflamación grave, el veterinario puede prescribir un antibiótico o corticoesteroides como parte de preparados combinados.
El veterinario debe determinar la prescripción y la dosis en función del peso del animal, su estado de salud y la extensión de la lesión. La automedicación puede ser peligrosa, ya que el uso incorrecto de los fármacos sólo complicará el curso de la enfermedad.
Conclusión
La otodectosis en los gatos es una enfermedad frecuente pero tratable. El reconocimiento precoz de los síntomas, las revisiones periódicas del oído, el tratamiento adecuado y la prevención ayudarán a preservar la salud y la audición de tu mascota.

