Tefi parece un osito de peluche después de un corte de pelo. El peluquero acentuó el color rojizo, dando al pelaje una forma y suavidad uniformes. Las patas permanecieron esponjosas y parecían almohadillas blandas, y la cola conservó su volumen y se convirtió en un bonito acento en el conjunto. Un detalle especial fue el hocico con ojos expresivos y forma redondeada, que da a Tefi un encanto único.
Tras el tratamiento, el pelaje se ha vuelto manejable y brillante, y el perro parece feliz y juguetón. Tefi está lista para atraer miradas de admiración por la calle y hacer sonreír a todo el que la vea. Es el resultado de una verdadera profesionalidad y atención al detalle.