Japón ha dado al mundo varias razas de perro únicas, pero las más reconocibles son elAkita Inu y el Shiba Inu. A primera vista, son casi gemelos: postura orgullosa, orejas erguidas, cola esponjosa plegada y expresión facial socarrona. La gente confunde a menudo estas razas, pensando que el Shiba es un Akita pequeño. En realidad, se trata de dos personalidades, historias y estilos de vida completamente distintos. Veamos cinco diferencias clave que te ayudarán a entender cuál es cuál.
1. Altura y peso
Éste es el criterio más obvio. El Akita Inu es un gigante entre los perros japoneses. Puede alcanzar una altura de 70 cm a la cruz y pesar más de 40 kg. Es un perro que impresiona por su fuerza y masividad. El Shiba-inu, en cambio, parece una versión de bolsillo: su altura varía entre 33 y 43 cm, y generalmente no pesa más de 12 kg. En un paseo, son fáciles de distinguir, incluso para alguien que sepa poco de razas. Si buscas un amigo compacto para un piso, el Shiba es la mejor elección, mientras que el Akita requiere espacio y mucho ejercicio.
2. Finalidad histórica
El Akita Inu tiene un pasado noble. Estos perros acompañaban antaño a los samuráis y se utilizaban para vigilar y cazar caza mayor: jabalíes o incluso osos. Se les adiestraba para que fueran defensores fiables y guerreros serios.
El shiba-inu, por su parte, era el ayudante de los cazadores sencillos en las regiones montañosas. Se caracterizaban por su agilidad y capacidad para desplazarse por terrenos difíciles. Su principal tarea consistía en cazar liebres, pájaros y otros animales pequeños entre los arbustos. Por eso los Shibas son enérgicos, atentos y rápidos de reacción.

3. Carácter y temperamento
El Akita Inu es un gigante tranquilo y sereno. Es reservado con los extraños, pero extremadamente leal a su familia. Los propietarios de Akita suelen señalar que sus mascotas tienen su propio código de honor: no montan un escándalo sin motivo, pero siempre están dispuestos a defender a su dueño.
El Shiba Inu es bastante diferente. Es una explosión de energía con el carácter de un verdadero individualista. Es curiosa, activa, le encanta explorar todo lo que le rodea y a veces se comporta como si decidiera qué hacer. Los propietarios de Shiba saben que adiestrar a esta raza requiere paciencia, ya que son testarudos y no siempre les gusta seguir órdenes.
4. Pelaje y color
Ambas razas tienen un grueso pelaje doble que les protege del frío. Sin embargo, el pelaje del Akita es mucho más voluminoso y requiere más aseo, sobre todo durante la muda.
En cuanto al color, el Akita suele ser rojo, blanco, atigrado o sésamo. El Shiba también tiene una paleta interesante: del rojo al negro con subpelo, pasando por el crema y el sésamo. Un rasgo característico del Shiba es lo que se conoce como «urojiro»: zonas de pelaje de color claro en el hocico, el pecho y el interior de las patas, que dan expresividad a su aspecto.

5. Esperanza de vida y salud
Debido a la diferencia de tamaño, la esperanza de vida de estas razas también es diferente. El Shiba Inu vive una media de 13 a 16 años y se considera un perro longevo. El Akita Inu tiene una esperanza de vida ligeramente inferior, de unos 10 a 13 años. Las razas más grandes son propensas a sufrir problemas articulares y musculoesqueléticos, por lo que el Akita requiere cuidados especiales. Al mismo tiempo, el Shiba, a pesar de vivir más, tiene sus propias vulnerabilidades: puede sufrir enfermedades oculares o alergias.
Conclusión
El Akita Inu y el Shiba Inu no son «un perro de dos tamaños», sino dos perros diferentes. El Akita es majestuoso, tranquilo, leal y serio. El Shiba es alegre, sabio, independiente y testarudo. Ambas razas son hermosas y carismáticas, pero debes elegirlas teniendo en cuenta tu propio estilo de vida. Si necesitas un guardián y amigo fiable en la casa de campo, es el Akita. Si buscas un amigo activo para pasear por la ciudad – el Shiba.



